La adolescencia es una etapa crucial para el desarrollo físico y mental. Durante estos años, muchos jóvenes muestran interés en el deporte y la actividad física, lo que a menudo despierta preguntas sobre el uso de suplementos. Sin embargo, la suplementación en adolescentes debe abordarse con precaución, ya que su cuerpo está en constante desarrollo y crecimiento.
¿Es Realmente Necesaria la Suplementación en Adolescentes?
En la mayoría de los casos, una dieta equilibrada y bien planificada es suficiente para cubrir las necesidades nutricionales de un adolescente. Sin embargo, en ciertas situaciones, los suplementos pueden ser útiles o necesarios, como por ejemplo:
Deficiencias Nutricionales Comprobadas: Como la falta de hierro, calcio o vitamina D.
Altas Demandas Energéticas: Para adolescentes que practican deportes de alta intensidad o resistencia.
Dificultades para Comer: Pérdida de apetito, alergias alimentarias o restricciones dietéticas específicas.
Suplementos Seguros y Comunes para Adolescentes
Proteína en Polvo: Útil solo si no se logra alcanzar los requerimientos diarios de proteínas a través de la dieta. Ideal para jóvenes que entrenan intensamente y tienen altos requerimientos energéticos.
Creatina: Aunque es segura en dosis recomendadas, su uso debe ser supervisado por un profesional y reservarse para deportes específicos como levantamiento de pesas o sprint.
Multivitamínicos: Especialmente en casos donde la dieta no sea variada.
Ácidos Grasos Omega-3: Beneficiosos para la salud cardiovascular y el desarrollo cerebral.
Vitamina D y Calcio: Claves para el desarrollo óseo durante esta etapa.
Errores Comunes en la Suplementación Adolescente
Usar Suplementos para Sustituir la Dieta: Los suplementos no compensan una alimentación inadecuada.
Tomar Productos No Regulados: Suplementos de baja calidad o sin certificaciones pueden contener ingredientes peligrosos.
Imitar Rutinas de Adultos: Los requerimientos de un adolescente son diferentes a los de un adulto, por lo que es un error seguir programas de suplementación no diseñados para ellos.
Autosuplementarse: Sin orientación profesional, se corre el riesgo de sobredosis o uso innecesario de productos.
Recomendaciones para Padres y Entrenadores
Fomentar una Alimentación Equilibrada: La prioridad debe ser siempre una dieta rica en frutas, verduras, proteínas magras y carbohidratos complejos.
Consultar a un Profesional: Antes de introducir suplementos, es esencial hablar con un médico, nutricionista o entrenador especializado en jóvenes.
Educar Sobre Suplementación Responsable: Ayuda a los adolescentes a entender que los suplementos no son atajos mágicos para el rendimiento.
Evitar la Presión del Rendimiento Extremo: Promueve un enfoque saludable hacia el deporte y la nutrición, priorizando el bienestar físico y mental.
Aquí en el Centro de Farmacología Deportiva Mexicana, NO recomendamos el uso de quimica (farmacos) en adolescentes debido a que puede causar diversos problemas en el futuro, como por ejemplo, deficiencia de testosterona.
Comments